Ingredientes
para 12-15 polvorones
1.
350gr de una buena harina de
repostería
2.
40gr de almendra cruda
3.
90gr de azúcar glas (más lo necesario para
decorar)
4.
125gr de manteca de cerdo
5.
3/4 chupito de anís dulce
6.
1/4 cucharada sopera de canela.
Preparación
1)
Moler la almendra pelada
2)
Ahora un
paso importante, mezclar el polvo de almendra con la harina.
Esta mezcla es fundamental, para ello usar un robot de cocina o
simplemente uno de los vasos accesorios de la batidora. El
molido es muy importante para la textura final del polvorón, así que
dedicarle unos minutos a darle caña que no estaréis perdiendo el tiempo en
absoluto. Si no tenéis ninguno de estos aparatos, no os preocupéis. Tamizar la
harina y mezclarla bien con la almendra manualmente...
3)
Una vez molida la mezcla la extenderemos en la
bandeja de horno y la meteremos dentro del mismo a 130º durante unos 40 minutos
dando vueltas cada 5 con la ayuda de una espátula de cocina...
4)
Al cabo de ese tiempo no pretendáis encontraros
una harina con un tono marrón, para nada. Obtendréis un tono blancuzco tirando
a amarillento, y eso sí, un olor muy especial. Este será el principio de
nuestra gran hazaña. La harina deberá de enfriarse y reposar por unas horas
(nosotros lo hicimos el día de antes.
5)
Al día siguiente (o al cabo de unas horas), nos
pondremos a trabajar la masa en la encimera o en un bol amplio. Añadiremos al
volcán de harina el resto de ingredientes y listos para amasar.
6)
Amasaremos la misma durante un ratito (6-8
minutos) con la misión de mezclar muy bien todos los ingredientes, no a de
formar una textura correcta. Compactada la dejaremos reposar unos 15 minutos
7)
Extenderemos ahora la masa de nuevo sobre la
encimera con las manos, dando un alisado superficial final con el rodillo. Este
será el grosor definitivo de los polvorones, el cuál es recomendable que sea
grueso como un dedo, porque quedan más buenos y son más firmes. Observaréis que
cuando estiréis la masa a lo ancho, por los lados se desfragmenta un poco, no
os preocupéis. Lo importante es que el centro esté compacto, si no fuera así
echarle algo más de manteca, ya supondréis que el mundo de las harinas no
atiende a medidas exactas.
8)
Una vez alisada la masa, y gracias a un simple
vaso de tubo o chato de vino, empezaremos a hacer las porciones. Lo que haremos
será cortar círculos de masa apretando el vaso sobre la misma y arrastrándolos
sin levantar el vaso de la encimera hacia afuera. Veréis que ya empezaremos a
producir los polvorones, y es una satisfacción ver lo bien que quedan. Si no tenéis
por casa algún cortapastas, desde luego que esta técnica es la mejor opción.
Una última cosa, conforme vayáis cortando los mismos los vais colocando en una
bandeja de horno (el papel sulfurizado es opcional). Los bordes de masa que os
sobren de la primera tanda, los volvéis a amontonar y así sucesivamente hasta
que la masa se acabe.
9)
Una vez colocados en la bandeja, los meteremos
dentro del horno al grill (habéis leído bien, sólo grill) durante unos 15 min
más o menos a potencia suave y hacia la mitad del horno, o mejor, hasta que la
masa empiece a dorar un poco sólo por la parte de arriba. Tener mucho cuidado
en este paso, deben de dorar sutilmente y jamás quemarse los dejamos enfriar en
la terraza, y una vez fríos les espolvorearemos por encima azúcar glas
10)
Algo
curioso, si queréis conseguir en vez de polvorones una especie de mantecados,
añadir a esta fórmula 40gr de manteca, 30gr más de azúcar, y el chupito entero
de anís. Si a esto le sumáis que no mezcláis mucho la harina con la almendra,
el resultado está riquísimo y es diferente.
FELIZ NAVIDAD